miércoles, 22 de septiembre de 2010

Lo siento.

Por curiosa me pasó y descubrí lo que terminaría por finalizar mi teoría de que no vine al mundo por una buena razón. Que daría por ver un sonrisa en tu rostro dedicada solo a mi, y que tus ojos brillaran por solo el hecho de sentirte orgullosa, ojala fuera así y he luchado tanto porque sea así y lo más probable es que me he tragado cosas de las más dolorosas solo por no ver lágrimas en ti, pero a pesar de mi ardua guerra contra lo peor de mi, tú no sientes más que decepción y tristeza al ver que no puedes poner ni una gota de esperanza en mi, piensas que soy una pequeña llena de sueños pero sin fuerzas para enfrentar el mundo pero ¿qué he hecho todo este tiempo? ¿acaso no has observado lo fuerte que me he vuelto? es cierto hay fantasmas que me siguen eternamente pareciendo una historia de jamás acabar pero dejando de lado eso, siempre lucho, siempre me levanto y a veces ni siquiera tengo una razón pero te miro y tú te vuelves la razón por la cual debo seguir caminando derecha, por que aunque pasen 30 años yo aún estaré esperando que me mires con orgullo y que agradezcas la decisión de no haber abortado.

sábado, 11 de septiembre de 2010

No dejes de sonreir.


En un lugar desconocido, donde pocas personas pueden llegar, había un reino con una de las más especiales características, cambiaba según el estado de ánimo de su dulce y tierna princesita, si ella estaba triste, los colores del reinado se volvían oscuros, si estaba enamorada todo se tornaba de color rosa, si estaba feliz, los colores eran naranjo y amarillo, todo dependía de ella, otra característica que poseía la adorable princesa es que conservaba una pequeña cajita donde guardaba amor y felicidad, la cuidaba para cuando llegara alguien especial para obsequiarle aquellos bellos sentimientos.

Un día la pequeña princesa se veía inundada en una tristeza que le parecía eterna provocando que todo su reinado se volviera oscuro, así que decidió caminar unos minutos para que el viento se encargara de llevarse aquel molesto sentimiento, mientras caminaba un pajarito de color púrpura se posó en su cabeza, la princesa muy delicada lo tomó entre sus manos y se dio cuenta que en una de sus patitas tenía una llave que estaba desgastada por el tiempo, la pequeña le preguntó su nombre pero el pajarillo no respondió y emprendió vuelo quien sabe a donde, la pequeña princesa un poco desilusionada volvió a su gran palacio, se dirigió a su habitación para poder descansar, cuando llego, noto que sobre su real cama se encontraba una llave, la misma que llevaba el pajarito, miró por la ventana y en uno de los grandes árboles estaba él, sólo mientras todos los demás pajaritos estaban agrupados jugando, la pequeña princesa puso la llave en una hermosa cadena y la amarró a su cuello y se acostó a dormir.

Al otro día cuando la pequeña despertó vio que el pajarito estaba en su ventana, ella se vistió, tomó al pajarito y lo dejó en su hombro y así salieron a recorrer el reino, la princesa era muy amable y siempre sonreía saludando alegremente a los ciudadanos, eso le agradó bastante al pequeño, sintiendo admiración por la princesa, luego de un rato llegaron a un lago y se encontraron con un muy gracioso sapo que llevaba una rosa y se dirgió hacía la princesa y le declaró su amor, la princesa se sintió tan admirada de aquel detalle que aceptó su amor logrando que el gracioso sapo, se convirtiera en un apuesto principe, ahora el reino tenía un tono rosa, ya que estaba enamorada y un tono naranjo por la felicidad que sentía de tener un amigo, el pequeño pájaro púrpura. Los tres, se dirigieron al reino para descansar de su agotador pero hermoso día. Cuando la princesita despertó se dio cuenta de que el pajarito púrpura no estaba, miró por la ventana y lo vio compartiendo con los demás pájaros, produjo tanta tristeza y desilusión en la pequeña, sentía que ya no le querría más y que los días soleados junto a su amigo habían acabado, el reino se volvió gris y el pajarillo lo notó, se dirigió donde la princesa, le mostró la llave colgada en su cuello, y le dijo '' eso es sólo tuyo, tú me mostraste lo maravilloso que puede ser el mundo, si compartes, que así la felicidad está al alcance, posees un cajita con algo muy especial adentro, dale el privilegio al mundo de recibir un poco de eso, y muestrales lo mismo que a mi, deja la ventana siempre abierta para que yo pueda venir a visitarte y no nos separemos nunca, todos tienen un lugar y el tuyo es único''.

lunes, 6 de septiembre de 2010

Un último esfuerzo

Un gran terremoto, destrozó todo, ahora sólo hay escombros, debo limpiar y mientras lo hago encuentro objetos que había dejado en el olvido, es tanto, que me veo eternamente ordenando mi casa, mi pequeño hogar el en que tanto me había esmerado, y ahora todo está dañado y muchas cosas ya no son lo que eran, debo limpiar lo sé, pero estoy agotada, es demasiado, las paredes están agrietadas, las ventanas...bueno ya no hay ventanas, por lo menos entra el delicado viento que está anunciando que se aproxima la primavera, los adornos y muebles quedaron inutilizables, me tiré al suelo para descansar un rato y descubrí que ahora tengo un tragaluz un poco rústico, el día está soleado y con blancas y esponjosas nubes blancas que se mueven lenta y suavemente, de repente un ruido molesto interrumpió mi descanso, tocaban la puerta, sin mucho ánimo me dirigí a ver quien venía a reírse de que el terremoto haya afectado sólo a mi pequeño hogar, cuando abrí la puerta, estaba parada ahí una chica no muy alta, pero sus finos rasgos y su blanca piel destacaban su dulce rostro, aunque tenía la apariencia de un niño en plena pubertad, cuando deje de observar los bellos detalles de su rostro me di cuenta de que venía con miles de cosas que parecían ser muebles y grandes malestas, ni siquiera me saludo, me miró al menos 30 segundos y entró con todas sus cosas y se instaló, miro detenidamente la casa para encontrar algún espacio para ella y todas sus cosas pero todo es ta tan sucio y roto, espero poder ordenar y limpiar mi casita.